jueves, 30 de abril de 2009

La "V" de Veganismo

La “V” es Virginal.




EL VEGANISMO HA SIDO CONCEBIDO POR EL INDIVIDUO Y PARA EL INDIVIDUO Y ELLA es la base de nuestra mística. Esto es así y no de otra manera, porque debemos evitar el estereotipo del molde populista que utiliza los valores “democráticos” para acceder a la aceptación y consolidación de la masa manipulando el resorte psicosocial a través de la reivindicación de derechos que nunca han existido.

Nadie tiene el derecho a la salud garantizado, la enfermedad no es una entidad democrática con la que se estipulan derechos y obligaciones, es fatal, no perdona, no concede.

Nadie tiene el derecho a la educación avalado. Si el individuo no acciona su voluntad para trascender el velo de la ilusión engañadora, educándose constantemente a sí mismo, ningún colegio o universidad lo sacará de su propia enajenación, el menoscabo, el conformismo mediocre.

Nadie tiene el derecho al trabajo. Trabajo es un verbo en infinitivo, implica acción, creatividad, voluntad, y un sistema político que brinde las estructuras adecuadas que propicien su realización y más que ningún otro verbo requiere de la acción consiente.

Nadie tiene derecho a la vida. Si no luchamos por sobrevivir, no existe ente que gestione esta voluntad por uno mismo. Ni vacunas, ni medicamentos, ni políticas proteccionistas avalaran un estado de SER. El aborto no atenta contra la vida, es su prohibición la que atenta contra la libertad de SER de una persona.

En Atenas, cuna de la verdadera democracia, nadie nacía con el derecho al voto. Este era un privilegio que había que ganarse. Solos las gentes con CONCIENCIA DE POLIS, que avalaban sus responsabilidades y capacidades personales con actos concretos, probados hasta en circunstancias extremas, podían ejercer ese derecho.

El significado original de la APACHETA, es una clave para socializar los nuevos símbolos, “nuevos” que en realidad tienen milenios escondidos en el inconsciente colectivo de los pueblos.
Así, de nuestra fuente espiritual legado de nuestros ancestros damos el primer paso en pos de la re-signación semiótica de la APACHETA.

Durante el Imperio de Tiwanacu el Atumuruna Sinchiruca legó el ritual sagrado verdadero de la Apacheta. Las piedras de la APACHETA representan a los ANCESTROS “Achachila Apacheta”, el túmulo se levantaba sobre un “peñasco especial” la “Piedra Fría” y el altar sirve para venerar a la VIRGEN, conocida por los “indios” como Pachamama. La ceremonia “Totanka” que consiste en escupir el acuyico de coca en una piedra especialmente signada con el signo de la muerte, es decir, un signo que representa al hombre en su condición de mortal, servía para significar el deseo del peregrino de desprenderse de las debilidades humanas, las enfermedades, el cansancio, el hambre, el derrotismo, en fin, de todo animismo, solicitando el acto de su Voluntad Virginal.

Lejos está la significación jesuítica impuesta culturalmente con la conquista, donde se identifica la Pachamama con Maria, que es considerada por ellos mismos como una mujer más, que solo fue elegida por su dios panteísta para llevar a su hijo, y que luego tuvo otros hijitos y murió en la ancianidad, o como en los cultos judeo-cristianos evangelistas, donde hasta afirman sin ninguna constatación histórica basada en estudios semiológicos serios del MITO, tildándola de demonio. Los comerciantes psicológicos, ávidos de bienes materiales, no dudan en hacerla dispensadora y protectora de bienes materiales. Esta demás decir que esto es solo distorsión cultural, y que por todo lo expuesto la Virgen esta mucho mas allá de cualquier culto, creencia, o concepto escatológico. ES UN SÍMBOLO QUE ENTRAÑA LOS MISTERIOS MAS PROFUNDOS Y TIENE DISTINTA SIGNIFICANCIA PARA CADA INDIVIDUO.

LA VIRGEN, PILAR DE NUESTRO MOVIMIENTO VEGANISTA, ES LA VERDADERA PACHAMAMA, a la cual no se consagran bienes materiales ni sangre humana o animal, es aquella que dispensa dones espirituales para orientarnos en el laberinto existencial del mundo material, y que otorga al hombre la fuerza para imponerse al destino impuesto por las potencias de la materia.

Es por esto que la estrategia veganista se sostiene en este símbolo y la polisemiosis derivada de su signo aglutinante: la “v”. Nuestro saludo esta expresado con el antebrazo en alto y los dedos pulgar e índice extendidos para representar la “v” de: virginidad, virilidad, valor, voluntad, veneración, virtud. En su aspecto, llamémoslo “negativo”, las palabras con “v” tan bien representan los símbolos de nuestro movimiento pues queremos restaurar a los que no soportan el vacío y cayeron en el vicio, la violencia anímica y psicológica, la vanidad, la vergüenza y satisfacer nuestra falta de plenitud, lograr la grandeza, la honra, la dicha.

Profundicemos un poco más en los símbolos de lo Virginal:


VOLUNTAD: Atributo de lo VIRGINAL que esta por encima de toda razón y de todo animismo. Solo quien tiene VOLUNTAD puede sentir el ESPÍRITU.
Voluntad es fuerza volitiva. Fuerza volitiva es acto irracional inspirado en el SENTIDO de llegar más allá de toda limitación material.

Solo la voluntad y el SENTIDO, pueden canalizar el HONOR.

DONDE LA RAZÓN SE INTERPONE Y EL CORAZÓN SOMETE, SOLO LA VOLUNTAD SE IMPONE.

La voluntad es el único vínculo real que tenemos con nuestra espiritualidad. Sin Voluntad solo hay abismo ontológico, pesimismo existencial, mercaderes psicológicos.

La Voluntad es extra-psicológica, no desea, más bien, BUSCA.

La Voluntad no es energía, es un vector iluminante.

La fuerza de voluntad PURIFICA.

La Voluntad es inmensurable, porqué es el factor diferencial entre el Tú y el Yo.

La Voluntad nos hace únicos, es INCREADA.

VALOR: Atributo de lo VIRGINAL que esta por encima de toda razón y de todo animismo, fuera de toda significación conceptual en el mundo de la materia.

Es extra-psicológico, no es un rasgo del carácter, ni se manifiesta por meros impulsos instintivos de conservación.

El Valor es una GEMA. La más preciosa de las gemas. La significación esta relacionada con algo que no tiene precio. Por lo tanto es un rasgo diferencial del Espíritu, y su símbolo se esconde en lo más profundo del inconsciente personal.

El Veganismo afirma por eso que debemos sumergirnos en nuestro inconsciente para hallar la GEMA preciosa.

Cuando encontramos este símbolo en el laberinto existencial de nuestro mundo psicológico, podemos tener la certeza de que no valoraremos nunca más nada externo o interno que no deslumbre como la luz pura de nuestro propio SENTIDO, reencontrado en la significancia profunda del VALOR.

El Verdadero valor voluntarioso es conducente para la conquista del HONOR.

VERDAD: Atributo de lo VIRGINAL que está por encima de toda razón y de todo animismo, surge en la instancia personal del HONOR, y es lacerante para el ánima, incomprensible para el sujeto culturizado en los dogmas del sistema. Y es lógico que así sea, pues destruye toda relación sostenida en la mentira esencial.

La verdad es comprensión, nunca extensión deseosa de proyectar libido en los entes.

La verdad enuncia los significaos reales de cualquier entidad, y desvaloriza el mundo psicológico plagado de símbolos incompletos y verdades a medias.

La verdad tiene necesariamente referentes históricos: uno personal, y otro colectivo. Hay que encontrarlos por uno mismo.

La verdad histórica esta en el revisionismo, la verdad personal, solo, y exclusivamente, en uno mismo.

El Veganismo afirma que LA CULTURA NO ES LA VERDAD DE NADA, sólo el engaño globalizado que nos retiene entre los vaivenes de nuestros propios deseos insatisfechos.

La verdad es VER el dominio del arquetipo contenido solo en el arquetipo mismo: DOLOR. El mundo es DOLOROSO. El placer sólo es una forma de dolor.

La VERDAD duele al alma, pero libera el espíritu.

VIRTUD: Atributo de lo VIRGINAL que está por encima de toda razón y de todo animismo, es una manifestación espiritual de REALEZA. Por lo tanto es SER y ESTAR.

Es virtuoso no quien niega al alma la satisfacción de un deseo, sino aquel que se da cuenta que todo deseo es ilusorio. Es permisivo con sus deseos, pero nunca comida para ellos.

La superstición, no es virtud. Virtud es comprender que el triunfo sobre la superstición es solo un paso para recuperar la dignidad.

La Virtud no tiene mácula, concupiscencia con la ilusión, por eso no miente, no se ilusiona.

La Virtud no es pedigüeña, es AUTONOMÍA, todo por uno mismo, es consecuente.

La Virtud no especula, la Virtud CONQUISTA.

Solo la VIRTUD nos hace dignos de ELLA.

VIRILIDAD: Atributo de lo VIRGINAL que está por encima de toda razón y de todo animismo, es un menhir siempre erguido ante el paso de las catástrofes y los milenios.

Viril es aquel que nunca doblega su palabra, su sentir y su acto.

Viril es el que no desea un mundo sin dolor, más bien, sabe que el mundo es dolor, y lo asume.

Viril no es el que juega para no mojarse. Viril es el que además de mojarse, seca su ahogo, y sigue adelante.

La virilidad solo es vulnerable ante el amor leal, pero como el amor leal no existe en el mundo de la cultura y sus objetos, aquel que es viril es INVULNERABLE.

Aquel que es viril asume la SOLEDAD, no se apoya en comunidades.

VEHEMENCIA: Atributo de lo VIRGINAL que esta por encima de toda razón y de todo animismo, porque ante todo es convicción reafirmada en lo intuitivo.

Vehemente es quien siente, por lo tanto, inspira.

La vehemencia no mide razones, las trasciende.

Vehemencia es elocuencia en sentido y acto. Inspiración auténtica.

Vehemencia es verbo restaurador. Palabra potente.

VIDA: Atributo de lo VIRGINAL que está por encima de toda razón y de todo animismo, porque es SENTIDO PURO E INMACULADO, y quien no se siente a sí mismo, no vive realmente y es incapaz de sentir a los demás.

VIRGINIDAD: Fundamento del VEGANISMO que esta por encima de toda razón y de todo animismo, pues mas allá de cualquier significación cultural, aglutina todo lo que tiene que Ver, con la Voluntad, la Virtud, la Vida, la Vehemencia, el Valor, la Virilidad, el Vigor, la V, que corre por las Venas de la sangre auténtica de quienes tenemos a la Virgen como soporte existencial, el Vacío que nunca se llena y nos condujo al Vicio de la búsqueda incesante de la felicidad, a la Vagancia y la Vanidad porque no toleramos el sin sentido, a la Venganza contra quienes quieren Vender su dignidad, a la Voluptuosidad de la ilusión sentida en el Vidrio espejado de la “realidad” que nos somete a la Vejación del dolor de la incomprensión que nos hizo Vulnerables a nuestro propio sentido, a nuestro recuerdo de amor en la luz de las Velas, Volando en la imagen del reencuentro con Ella, la Voraz pasión que nos aqueja y que solo el Viento frió puede aplacar, mirando a Venus con su Verde resplandor, y la nostalgia que sentíamos en la Vega, el Valle fértil donde aprendimos el significado de lágrima para luego ser quemados con fuego y azufre, pues la sangre Vaginal Venera el Vientre muerto que niega la Vida sin gloria de la Vana búsqueda de la Verdad; Visión dantesca de un mundo comercial Vacuo, donde las Vacas pastan y defecan sin premura, ignorantes de la muerte que acecha en el redil donde el Viandante espera el fin de los tiempos.

EL SENTIDO LO ES TODO. SOLO A TRAVES DEL SENTIDO VIRGINAL PODREMOS RECUPERAR EL HONOR.





1 comentario:

RespuestasVeganas.Org dijo...

El veganismo no es nada de lo que usted comenta en este blog. El veganismo es una filosofía y un estilo de vida basado en el respeto a los animales sintientes. Por este motivo, los veganos seguimos una alimentación 100% vegetariana, no vestimos pieles ni otros materiales animales, no asistimos a espectáculos que usan animales no-humanos, etc.

http://es.wikipedia.org/wiki/Veganismo

Saludos,
David.